Skip links

Navidad consciente

¿Te apetece parar para elegir como vivir (o sobrevivir) esta Navidad?

Todo perfectamente iluminado: plazas, balcones, ventanas, escaparates. Calles abarrotadas de gente, de coches, de ruido. Unos van y otros vienen. Todos con prisas. Una cena tras otra, regalos que te saturan y vacían tus bolsillos “porque toca”. Tu cuerpo te pide parar y no te enteras. Tu mente atropellada, no da para más. Y dejándote arrastrar por todo este sinsentido, de pronto paras y te preguntas “¿realmente quiero vivir así esta Navidad?”.

¿Alguna vez te has sentido así, aunque sea por un instante? 

En ocasiones lo he hablado con familiares y amigos y todos coincidimos afirmativamente. Además, coincidimos en la inconsciencia de llegar a la situación y en que, cuando tomamos consciencia de ella, es porque ya estamos saturados. Ya nos lo hemos perdido.

Con la práctica de Mindfulness a veces ocurre algo curioso y es que, cuando más lo necesitas practicar por distintas circunstancias, menos lo practicas. Es más “cómodo” ponerse en modo “piloto automático” que tomar consciencia de todo. Pero, ¿por qué?. En el caso de la Navidad, al tomar consciencia plena de tanto ajetreo, gasto, tiempo, cansancio, etc, nos veríamos en la tesitura de renunciar a algunas cosas. Esto sería realmente liberador, ¿no?. Pues no del todo, porque también implicaría tomar decisiones que no siempre gustan a los demás y eso nos podría llevar al remordimiento. Priorizar nuestro bienestar, podríamos percibirlo como un acto de egoísmo (cuando realmente es todo lo contrario!). Liberarnos de tanta carga implicaría calma, tranquilidad y serenidad ¿en plena Navidad?. Decidir sobre nuestra propia Navidad, implicaría ir a contracorriente, y…¡como osar a ello!

Mindfulness en Navidad, también sería tomar consciencia de la inconsciencia de la Navidad y elegir libremente sobre cómo vivirla

En fín, que tomar consciencia de nuestra inconsciencia navideña (eso también es Mindfulness), nos haría actuar desde la libertad plena y nuestra propia luz. Y digo yo, ¿me voy a perder tanto sarao, engordar 2 kilos (ojalá sólo dos!), acabar hasta el moño de maquillarme, destrozar mis pies con los tacones, gastarme una pasta en regalos y enchufarme la sonrisa postiza, sólo por ser consciente de lo que ocurre?. Lo digo en tono de humor, pero es algo muy serio.

Ante la toma de consciencia de la inconsciencia Navideña, tenemos dos opciones:

1 / Dejarnos llevar, pasando las fiestas como buenamente podamos y ya si eso, el 7 de Enero cuando nuestro cuerpo no pueda más, nuestra mente esté saturada y nuestras casas vuelvan a su tranquilidad habitual, volveremos a conectarnos a nuestras vidas.

2 / Tomar consciencia plena, eligiendo desde nuestro propio autocuidado, seleccionando nuestros reencuentros, comiendo con consciencia, sonriendo desde dentro, regalando con sentido y responsabilidad y brillando desde nuestra propia luz interior.

Tener una Actitud Positiva, implica tomar consciencia de ambas opciones, y desde la plena libertad elegir entre una de ellas. Te animo a parar y respirar, calmando cuerpo y mente. Una vez conectado a tí, decide lo que quieres y cómo lo quieres hacer.

navidad consciente

Te deseo una Feliz Navidad en la que brilles con luz propia.

Un fuerte y cálido abrazo,

Ana

Leave a comment